Conocida por su color amarillo intenso y por ser uno de los ingredientes principales
en la preparación del curry, la cúrcuma es una especia originaria de la India que,
además de su uso culinario, es valorada por sus propiedades medicinales desde la
antigüedad.
Uno de los principales componentes activos de la cúrcuma es la curcumina, un
compuesto con potentes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. A través de
los años, diversos estudios han demostrado que la curcumina puede ayudar a
reducir el dolor y la inflamación en enfermedades como la artritis, la colitis y la
enfermedad de Crohn. También se ha comprobado que la curcumina tiene
propiedades neuroprotectoras, lo que significa que puede ayudar a proteger el
cerebro contra el daño celular y el envejecimiento.
Pero, además de sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, la cúrcuma
también puede ser beneficiosa para la salud digestiva. Como dijimos antes, se ha
demostrado que puede reducir los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII)
y puede ayudar a aliviar el estreñimiento, así como a prevenir la formación de
úlceras en el estómago al reducir la cantidad de ácido gástrico producido por el
cuerpo.
La cúrcuma también puede ser beneficiosa para la salud cardiovascular, pues
puede ayudar a reducir el colesterol LDL (conocido como colesterol malo) y los
triglicéridos. También puede mejorar la función endotelial, lo que puede reducir el
riesgo de padecer enfermedades cardíacas.
Pero, ¿Todo sobre la cúrcuma son beneficios? Bueno, aunque se considera
generalmente segura y bien tolerada por la mayoría de la gente, algunas personas
pueden experimentar efectos secundarios, incluyendo la irritación estomacal.
La irritación estomacal puede ocurrir cuando se consume demasiada cúrcuma o
cuando se utiliza en grandes cantidades durante un período prolongado. Esto se
debe a que la curcumina puede estimular la producción de ácido en el estómago, lo
que a su vez puede causar acidez estomacal, náuseas y una sensación de malestar
general. Además, algunas personas pueden ser alérgicas a la cúrcuma o tener una
sensibilidad a ella, aumentando la posibilidad de manifestar irritación en el
estómago.
Para reducir el riesgo de irritación estomacal al ingerir cúrcuma, es importante
consumirla con moderación y en cantidades adecuadas. Se recomienda consumir
no más de 1 cucharadita al día, así como tener en cuenta que la cúrcuma puede
interactuar con algunos medicamentos como los anticoagulantes, por lo que es
importante hablar con un médico antes de consumirla si se tiene un tratamiento en
curso.
En otras palabras, la cúrcuma puede irritar el estómago en quienes tienen
antecedentes alérgicos o en general son sensibles a los padecimientos
gastrointestinales. Lo ideal es consumirla con moderación y en cantidades
adecuadas para disfrutar los numerosos beneficios que puede tener en la salud,
derivados principalmente de su capacidad para reducir la inflamación y actuar como
un antioxidante.
Te recomendamos extracto de cúrcuma para evitar la irritación de tu estómago.