Si has buscado opciones para bajar de peso o estás cerca de alguien que se encuentra en proceso de lograrlo, seguramente has escuchado acerca del déficit calórico. La mayoría de los nutriólogos y entrenadores lo recomiendan como uno de los primeros pasos a seguir para lograr los objetivos de transformación física, pero, ¿Sabes exactamente qué es y en qué consiste?
Las calorías son las unidades de energía que se encuentran en los alimentos y bebidas, que sirven como el combustible que el cuerpo necesita para moverse y funcionar todos los días. Cuando quemas más calorías de las que consumes, entras en un déficit calórico. Diariamente, todos quemamos calorías de muchas maneras, incluidas las funciones corporales que llevas a cabo prácticamente sin darte cuenta, como respirar, digerir y metabolizar los alimentos, y mediante actividades como la práctica de deportes, de una disciplina artística o cualquier otro pasatiempo.
Tener un déficit de calorías significa que estás quemando más calorías de las que estás consumiendo, lo cual tiene como consecuencia la pérdida de peso en la mayoría de los casos.
Para perder peso de manera saludable se recomienda, en general, aspirar a un déficit de alrededor de -500 calorías por día. Siguiendo este cálculo, hay 3 pasos clave a seguir para calcular tu propio déficit de calorías:
- Calcula tu tasa metabólica basal
- Calcula cuántas calorías quemas cada día aproximadamente
- Resta 500 calorías para encontrar tu meta de calorías, cuidando no afectar la tasa metabólica basal
Cuando conoces tu déficit calórico tienes dos áreas en las cuales concentrarte: lo que estás consumiendo y, en segundo lugar, tus niveles de actividad. Lograr el equilibrio perfecto entre los dos es el objetivo, pues al hacerlo habrás encontrado una forma segura para perder peso y mantenerte saludable.
La alimentación es el elemento más importante para mantenerse en un déficit de calorías como parte de un plan de pérdida de peso. El ejercicio regular es de gran ayuda, ambos hacen una combinación poderosa, pero es mucho más fácil mantener la reducción de la ingesta de calorías en 500 kcal que quemar 500 calorías haciendo ejercicio todos los días. ¿Complicado? ¡Para nada! Lógralo siguiendo estos consejos:
- Lleva un conteo de calorías: Descarga una aplicación en tu celular que pueda ayudarte a realizar un seguimiento de las calorías que consumes. La mayoría de las aplicaciones destinadas a este uso funcionan ingresando los datos de tus comidas, refrigerios y bebidas, para que el software las reconozca y te aporte la cantidad de calorías que estás consumiendo.
- Elimina/reemplaza alimentos altos en contenido de azúcar: Reemplaza las golosinas calóricas por opciones ricas y saludables que sean igualmente capaces de satisfacer tu antojo. Opta por una porción de yogurt natural, una barra de granola o un licuado de frutas. Si no puedes decirle adiós a tus snacks favoritos o te cuesta trabajo abandonarlos, prueba endulzando todas tus recetas con Stevia Líquida Natural, una alternativa saludable, deliciosa, nutritiva y libre de calorías y carbohidratos; o sea, 100% libre de culpa.
- Beba más agua: Cambia las bebidas gaseosas y el café con leche por agua natural, aguas frescas a base de frutas naturales y café negro. Las bebidas suelen ser las responsables de que muchas personas no se den cuenta de cuántas calorías beben cada día. El azúcar presente en los cafés y en los refrescos es prácticamente imperceptible, pero puede impedirte lograr tus objetivos. Beber más agua simple y cambiar el azúcar por como endulzante te ayudarán a dejar atrás, poco a poco, al azúcar y sus efectos nocivos.
- Come más alimentos ricos en fibra: Aumentar la ingesta de fibra es fundamental para ayudar a reducir la absorción de calorías en el intestino y mejorar el metabolismo.